Japón vence a Estados Unidos y se convierte en el segundo campeón invicto en la historia del Clásico Mundial de Béisbol

La novena nipona conquistó su tercer título en el evento al superar 3-2 en la final al conjunto estadounidense
Miami, Florida. – Munetaka Murakami y Kazuma Okamoto conectaron un par de cuadrangulares, mientras que Shohei Ohtani brilló como relevista para ponchar y propinar el último out a Mike Trout, para que Japón venciera el martes 3-2 a Estados Unidos y conquistara su tercer Clásico Mundial de Béisbol (WBC) en el loanDepot Park, de Miami.Con el triunfo, el conjunto nipón que, por lapsos fue apoyado por cánticos de plena de ‘Voy subiendo, voy bajando’, así como ‘Cortaron a Elena’, se convirtió en el segundo campeón invicto en la historia del torneo. Previamente lo hizo República Dominicana en 2013.
Ohtani fue nombrado ‘MVP’ tras promediar .435 con nueve anotadas y ocho impulsadas. Además, foja de 2-0 con 1.86 de efectividad.
Es, igualmente, el primer título para Japón en el evento tras perder en semifinales consecutivas ante Puerto Rico y precisamente Estados Unidos, en las ediciones de 2013 y 2017, respectivamente. La novena nipona logró el ‘back to back’ en 2006 y 2009, con el lanzador Daisuke Matsuzaka siendo nombrado Jugador Más Valioso en ambas ocasiones.Trea Turner, el bate más caliente que tuvo el conjunto estadounidense en todo el torneo, le dio la temprana ventaja al equipo dirigido por Mark DeRosa en la parte alta del segundo episodio.
Turner conectó su quinto cuadrangular del torneo para poner la pizarra, 1-0. A su vez, igualó al coreano Seung Yuop Lee (2006) como el máximo jonronero en un solo WBC.Japón ripostó rápidamente en la parte baja de ese mismo inning, cuando Murakami, héroe de la semifinal ante México, desapareció la pelota por el jardín central. Fue el primer jonrón en el WBC para el nipón de 23 años, que posee la marca de cuadrangulares (56) en una sola campaña para un pelotero en la liga japonesa.
Luego, una roleta de out de Lars Nootbaar trajo al plato la segunda para los nipones.
No fue hasta la parte baja de la cuarta entrada, que Japón extendió la ventaja con jonrón solitario de Okamoto.
Estados Unidos tuvo un último empuje en la parte alta de la octava entrada, con cuadrangular de Kyle Schwarber al jardín central.
Pero Ohtani silenció los bates estadounidenses desde el relevo.
Fue la cuarta ocasión en que ambos equipos chocaron en el Clásico Mundial. El conjunto de las ‘barras y las estrellas’ envió a casa 2-1 en semifinales a Japón en 2017, desquitándose del revés previo en semifinales de 2009.
En aquel entonces, los japoneses superaron 9-4 a los estadounidenses.
El primer enfrentamiento entre ambos fue en la segunda ronda de la edición inaugural en 2006, cuando Estados Unidos ganó, 4-3.